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sábado, 27 de septiembre de 2014

DULCES TÍPICOS

 

En el estado de Puebla, se produce una gran variedad de dulces que destacan por su gran colorido y variedad de sabores, la mayoría creados desde la época colonial con la llegada de los españoles y productos  Los dulces típicos poblanos surgieron en los conventos de las diferentes órdenes que existían en Puebla: clarisas, dominicas o carmelitas entre otras.dulces
Los dulces típicos de la región, también surgieron de los conventos de la época Colonial, cuando las monjas de Santa Clara y de Santa Rosa, ofrecían a la población diferentes tipos de dulces y galletas; compitiendo en ingenio y dedicación, se logró una gran variedad entre las que destacan los camotes dulces, de diferentes sabores, tortitas de Santa Clara, borrachitos, macarrones, envinados, jamoncillos de nuez, piñón o pepita, hechos a base de leche, muéganos, marinas de nuez y pepita, trufas, gaznates, mazapanes, caracoles, duquesas, espejos, polvorones, limones rellenos de coco, alegrías de semilla de amaranto, dulces de fruta cristalizados, caballitos de panela, etc.
Se pueden encontrar en diferentes tiendas por toda la ciudad, pero donde tradicionalmente se han vendido desde hace ya muchos años, es en la zona artesanal de la ciudad de Puebla, en el centro histórico, las calles 4 y 6 oriente, desde la calle 5 de Mayo hasta la zona del Parián, que está en la 6 Sur. Son un delicioso recuerdo para el turista de todo el mundo.
También se crearon bebidas tradicionales, que han sido vendidas en la misma zona por mucho tiempo, como la pasita, el rompope, también hecho por las monjas, vinos dulces a base de frutas.
Se relata una leyenda sobre la creación en el siglo XVII de los famosos camotes poblanos, en el convento de Santa Rosa. Una novicia de nombre Angelina de 13 años, creó la receta al hacerla dulce, por primera vez, ya que recibían en ese entonces camotes como donaciones. La propuesta la hizo por la visita al convento del Obispo Don Manuel Fernández de Santa Cruz y Sahagún.
Los Dulces más conocidos por su tradición centenaria se muestran a continuación, con una breve descripción que nos dará una idea más exacta de lo que son y su deliciosa variedad de sabores.
 
 
 
Alegrías
Son galletas hechas de amaranto tostado, preparadas con piloncillo o panela para endulzar y limón en una mezcla compactada que al morderla se despedaza en la boca, de consistencia un poco dura. En ocasiones se le agrega nuez picada. Tiene las propiedades de nutrición de la semilla de amaranto, planta originaria de Norte y Centro América.
 
Bocados de Coco

 
Dulce tradicional con la consistencia del coco rayado, preparados también con harina y azúcar en forma de bolitas blancas con canela.
Borrachitos

Son dulces cremosos hechos de harina espolvoreados con azúcar, de sabores limón, piña, fresa, rompope, entre otros. Lo que le da el tradicional nombre es que se añade licor como uno de los principales ingredientes. Como la mayoría de los dulces, fueron creados por las monjas de Santa Clara y de Santa Rosa para regalar en agradecimiento a sus benefactores, y que después aprendieron a comercializar para lograr fondos para sus congregaciones.
Dulce de Alfeñique
Procede de España, pero a su vez tiene origen en la cultura árabe desde su nombre, con el que se referían a una pasta dulce y estirada en barras retorcidas. Se utiliza para la celebración del día de Muertos en México y tiene importancia en la gastronomía de Puebla.
Los Camotes Poblanos


El camote es un tubérculo de la familia Convolvulaceae, una papa dulce cultivada por su raíz engrosada, cuyas propiedades alimenticias han sido apreciadas desde la antigüedad.
Las monjas prepararon el dulce mezclando el tubérculo con azúcar, agua, escencia de sabor como naranja o limón y a fuego lento formaron una masa almibar con una consistencia como de puré. Se vende en forma de tubo envuelto en papel cerrado en ambos extremos.
Jamoncillo de Pepita y Piñón

Del tradicional dulce de leche, complementado con las deliciosas semillas de calabaza o del piñón, se logra una textura y sabor especiales, que combinados nos dan la experiencia más deliciosa. En forma de bolitas de diferentes tamaños en colores amarillo y rosa, o en barras de colores blanco y rosa o rojo; se presentan también con forma de gallito o paloma, o cualquier otra ave para atraer la atención de niños y adultos, son de lo más distintivo en los dulces artesanales de Puebla.
Macarrones

El tradicional dulce de macarrón está hecho de leche principalmente, con sabor y textura suave, es uno de los preferidos por turistas y locales. En forma alargada y color café claro, es de consistencia cremosa. Tiene su origen también en el Convento de Santa Clara. Los hay de piloncillo que suelen ser de color más oscuro.


Muéganos

Este es hecho de harina de trigo fritas en aceite vegetal y cubierto de caramelo de azúcar y piloncillo. De consistencia suave, se deshace en el paladar dejando un sabor discreto y no demasiado dulce.
Polvorones

Originario de España, este dulce de cacahuate y harina  es muy similar al polvorón sevillano, se puede decir que poca es la diferencia, sin embargo, no menos importante que cualquiera de la variedad Poblana y no puede faltar por su sabor delicios y textura suave.

Tortitas de Santa Clara
Como se mencionó anteriormente, uno de los dulces más distintivos de Puebla, fueron creados en el Convento de Santa Clara durante la Colonia Española. Se cuenta que una monja estaba buscando nuevas combinaciones con el recién creado dulce de Pepita, y se le ocurrió combinarlo con una galleta, resultando este famoso dulce.
Como se menciona, son Galletas de harina con cubierta dulce de pepita de calabaza (semilla de calabaza pelada), leche y agua.  La galleta se hornea y al estar cocidas, se le añade la mezcla de leche y semilla de calabaza molida, la cual al enfriar se solidifica quedando una deliciosa cubierta de color blanco.